|Sonaba Justin Walter ~ Dream Weaving. Escúchalo en SOUNDCLOUD|
Sábado por la mañana. Lucas me cuenta que está en los Scouts. Tiene el pelo negro revuelto y rizado, y lleva la pañoleta azul y blanca de su grupo anudada al cuello. Es Lobato, y saluda con dos dedos de la mano: cuando sea Rover, lo hará con tres. Además, está practicando un grito de dinosaurio. Me pregunta si lo he escuchado. "Sí" le contesto. Llevo un buen rato escuchándolo a través de la pared que separa la sala de Yoga de la del Grupo de Teatro Infantil, por encima de las voces de sus compañeros y de su paciente y, a ratos, un poco desbordado profe.
De vez en cuando, Lucas mira hacia otro lado cuando habla. Es muy lindo. Tiene algo que no tienen el resto de los niños. Brillo. Mientras hablamos, su madre me dice algo en voz baja, también como mirando hacia otro lado, algo que entreoigo y aún estoy procesando cuando Lucas pone su mano sobre mi coronilla y dice sonriendo "Es usted muy amable". De nuevo, mira hacia otro lado, y se deja guiar por su madre hacia la salida mientras ella le explica "Puedes llamarle de tú, cariño". Y ella, ¿qué murmuraba? ¿qué me decía? Lo entendí a la primera, pero no lo comprendía. "Es autista".
Ocurren estas cosas los sábados por la mañana.
Sábado por la mañana. Lucas me cuenta que está en los Scouts. Tiene el pelo negro revuelto y rizado, y lleva la pañoleta azul y blanca de su grupo anudada al cuello. Es Lobato, y saluda con dos dedos de la mano: cuando sea Rover, lo hará con tres. Además, está practicando un grito de dinosaurio. Me pregunta si lo he escuchado. "Sí" le contesto. Llevo un buen rato escuchándolo a través de la pared que separa la sala de Yoga de la del Grupo de Teatro Infantil, por encima de las voces de sus compañeros y de su paciente y, a ratos, un poco desbordado profe.
De vez en cuando, Lucas mira hacia otro lado cuando habla. Es muy lindo. Tiene algo que no tienen el resto de los niños. Brillo. Mientras hablamos, su madre me dice algo en voz baja, también como mirando hacia otro lado, algo que entreoigo y aún estoy procesando cuando Lucas pone su mano sobre mi coronilla y dice sonriendo "Es usted muy amable". De nuevo, mira hacia otro lado, y se deja guiar por su madre hacia la salida mientras ella le explica "Puedes llamarle de tú, cariño". Y ella, ¿qué murmuraba? ¿qué me decía? Lo entendí a la primera, pero no lo comprendía. "Es autista".
Ocurren estas cosas los sábados por la mañana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario